Capitolo 64 Sì
Máximo cerró la puerta con los pies y luego fue a sentarse con Carolina en el gran sofá de color negro, ella se puso arriba, mentre él le apretaba el trasero, presionándola hacia abajo.
"¡Eres tan jodidamente caliente!", dijo el hombre besando su cuello, haciendo gemir a la morena. Luego mordió sus labios y ella gritó, ma pero de placer.
"¡Sì, Massimo!". Carolina pensò che non podía manejar il torbellino de emociones que la estaba inundando, poi habló: "Amor... quiero...".
É l levantó el vestido con lentitud, y le pasó la mano por las piernas, paseando primero por dentro de los muslos e le dio un apretón allí. Poi, alzò la mano un po' di più e toccò la sua intimidad, donando una sua dolce sonrisa.
"Estás tan mojada, mi linda puti ta", sonrió maliciosamente y le dio a Carolina una gran palmada en el trasero antes de volver a apretar. Luego ha fatto la sua mano e ha iniziato a frotar nella sua zona intima. In un movimento rapido, Máximo dejó alla donna debajo de sus brazos. El metió un dedo en Carolina, se lo llevó alla boca y chupó, chiudendo gli occhi mentre lo hacía. "Me muero por saborearte, mi amor".