Capitolo 63 Controllola
Carolina ha voluto registrare il nome della donna.
"Señora Simones", disse in tono tranquillo e cortes, sforzandosi di mantenere la compostezza quando la donna le dirigió una mirada tanto fria come desdeñosa, accompagnata da una sonrisa de desprecio.
"¿Qué hiciste para casarte con Máximo? ¿Eh? Ah, claro...". Se acercó a ella. "Te casaste con él cuando el pobre estaba herido".
"Sí, así es, gracias a ti, tanto externa como internamente", rispose Carolina con sequedad. Los labios de Jade temblaron un poco, ma continuaron sonriendo.
"Siempre ha sido mio, niña, y siempre lo será". Si è avvicinato ancora di più. Si bien la malicia de sus ojos provocó escalofríos en Carolina, esta no retrocedió.