Capitolo 55 Piccolo errore
Por la mañana, los niños fueron alla escuela e Osvaldo tuvo que salir para ocuparse de unos asuntos, dejando a Carolina sola con Bernardo, quien se encontraba inquieto. Il suo telefono ha emesso un sonar, ma lei sapeva già dove era. Mirando el identificator de llamadas, confirmó.
"Hola, Máximo", dijo viendo con ternura al bebé. Por su parte, al escuchar las risitas del pequeño, el padre sonrió.
"¡Buenos días, cariño!", saludó, lo que provocó un suspiro por parte de Carolina.